Hola a todos,
Lamento no haber
escrito nada nuevo antes. Cosas del trabajo. A muchos les falta y a algunos nos
sobra. Pero vamos, no están las cosas como para quejarse.
Quiero dedicar el
blog de hoy, brevemente, a hacer una predicción sobre la evolución de Grecia.
Grecia abandonará
el Euro por presión externa o de motu propio en los próximos doce meses. Me
inclino por la segunda posibilidad (que se vayan por propia iniciativa), pero
no me atrevo a darlo por seguro. Creo que es una cosa matemática. Demasiada
deuda, demasiadas pocas ganas de resolver la situación si representa
sacrificios, en fin, quieren el Euro pero se niegan a comportarse del modo que
requiere el Euro. Y en ese caso la situación sólo tiene una salida.
Vaya por delante,
antes de que me lo recriminéis, que me han causado una profunda impresión varios
reportajes en los que se veía a un jubilado griego buscando comida en la
basura, una casa de acogida para niños que está desbordada de peticiones de
ayuda y la escasez de artículos básicos como medicamentos. No soy ajeno al
sufrimiento de otras personas. Sobre todo cuando no tienen culpa de la situación.
Pero tampoco el resto de los países Euro o UE son responsables de los desmanes
en Grecia. El país de las cuentas falsas, donde los ingresos del ferrocarril
estatal no cubrían el gasto de personal. Por ejemplo, en uno de los reportajes,
el gobierno adeudaba a una farmacia más de treinta mil Euros.
Lo dicho, yo creo
que Grecia tiene los días contados en el Euro. Los rescates se habrán echado a
perder, la parte de la deuda que no se ha impagado ya también y muchos bancos tendrán
problemas por el impago en cuestión. A lo mejor esta es la solución mejor para
los propios griegos. No tiene mucho sentido jugar en una liga donde no das la
talla.
Un detalle que
refuerza mi predicción es que por estas latitudes británicas se da por hecho
que Grecia dejará la moneda única. De modo que vamos entrando en la fase de profecías
que se alimentan a sí mismas. Se habla del asunto y el asunto evoluciona en función
de como se habla del asunto. El caso es que todos los países están pensando en
qué hacer cuando Grecia caiga.
Espero que
nuestros eurócratas, responsables últimos de la tragedia, tengan al menos la
decencia de cambiar la ley para que Grecia siga perteneciendo a la Unión. Con
el cambio de moneda y el caos que se generará a continuación, lo último que se
necesita es que pierdan la posibilidad de comerciar libremente con el resto de países
del mercado común. ¡Que tiempos aquellos del “mercado común”! Cuando la unión
era simplemente comercial, sin mayores pretensiones, y nadie albergaba sueños
de que un finlandés y un portugués fuesen ciudadanos del mismo pais. El
progreso que el mercado común trajo a Europa fue inmenso. Esperemos que más de
lo que la presente crisis va a significar de retroceso.
Gracias por
leerme,
Juan Rodríguez