Friday 1 March 2013

Enhorabuena hasta cierto punto.



Estimados amigos,

Ya han salido las primeras estimaciones de las cuentas públicas de 2012. De confirmarse creo que suponen un paso en la buena dirección, pero no comparto ni el éxtasis del gobierno ni los halagos de muchos medios de comunicación. Como en tantas ocasiones, lo importante se esconde en los detalles.

En primer lugar estas cifras son estimaciones que luego se revisan a la luz del cierre oficial de la contabilidad. Recordemos sin ir más lejos la hinchazón progresiva del déficit de 2011, que empezó en el 6%, subió a más del 8% para quedar finalmente por encima del 10% si mal no recuerdo. Esperemos que eso no vuelva a suceder. En Europa están hartos de pillerías y una cosa de este estilo comprometería gravemente la credibilidad del país.

En segundo lugar todo este tinglado del déficit huele a trampa. Por un lado el objetivo de déficit era del 6.3% (empezó en el 4 y pico, para subir un par de veces) con lo cual, de ser las cifras correctas, España no ha cumplido su compromiso. En mis tiempos mozos te suspendían y volvías en Septiembre. No así en los tiempos modernos del “necesita mejorar” donde se celebran los fracasos. Imagino que nos permitirán a partir de ahora pagar el IVA al 19.7%, que no es lo establecido, pero casi. Estas cosas me recuerdan un par de asignaturas de la carrera que aprobé con un 5 coma cero, o sea, un 4 coma 6 maquillado al alza. Creo recordar que si celebré estas contadas muestras de generosidad de mis profesores, pero con la cautela del que sabe que debe tanto al gesto de misericordia como a la propia sabiduría. La trampa más interesante consiste en excluir el rescate bancario que, curiosamente, si se añade, deja la cifra en el 9.9% (sospechosamente cerca del 10%). Esta argucia cumple un doble objetivo: el más burdo de rebajar la cifra y el más sutil de “quitar importancia” a lo de los bancos, un escandalazo en toda regla del que se habla menos de lo que se debiera.

Mi tercera objeción a la euforia del gobierno es el modo en el que se ha llegado a este mágico 6.7%. Parece ser que el ajuste se ha materializado en el cuarto trimestre (práctica bien conocida entre los malos estudiantes), pero, aún más importante, se ha hecho a costa de una subida fuerte de impuestos. Lógicamente esta subida y la crisis internacional han puesto la cifra de recesión económica en un 1.7% para 2012, que no está nada mal. Estas políticas empobrecen a la población y dificultan la recuperación. Yo soy partidario de ajustes en los que predomine la reducción del gasto. Del gasto inútil, del gasto que nunca debiera haberse aprobado. Bajar sueldos y pensiones es una medida simplona propia del que no quiere pensar demasiado.

En resumen, la noticia es buena pero hay aspectos muy mejorables. La confianza creo que era escasa y ya había rumores de que se “relajaría” el calendario de reducción del déficit. Por cierto, sería bueno tener un calendario de reducción de la deuda. El déficit no es más que lo que se añade a la ya rampante cifra de la deuda total, que supongo que habrá que pagar en algún momento. El objetivo debiera ser alcanzar un estado de deuda cero. En el caso de particulares y empresas se considera que la deuda es sólo aceptable para adquirir bienes necesarios y caros: infraestructura, vivienda, maquinaria… Si el crédito es para poder comer o para pagar la nómina, mal asunto. La sangría de intereses que se pagan por la deuda supone un desperdicio de recursos inaceptable.

Por cierto, para concluir, ya se trató en este blog la importancia del lenguaje, de llamar a las cosas por su nombre. Me gustaría recordar simplemente que, en términos económicos, lo contrario de austeridad es despilfarro y lo contrario de crecimiento es recesión. Lo digo porque sigue habiendo gente que utiliza crecimiento como antónimo de austeridad. En todo caso, yo sigo sin ver la austeridad por ninguna parte. Entendida como gastarte lo que te puedes permitir y ni un duro más.

Gracias por leerme.



Juan Rodríguez

6 comments:

  1. Miedo me dan esos triunfalismos. Ya estamos demasiado acostumbrados a las mentiras del mal estudiante.
    Pero lo que más miedo me da es que, efectivamente, lo fácil es quitar el "chocolate del loro" ¿por qué tanta complacencia en Bruselas con esas actuaciones y no apuntar a las verdaderas causas del endeudamiento?
    ¿Por qué Bruselas, y sobre todo Berlín, están tan contentos con que se reduzca el poder adquisitivo de los ciudadanos, lo que conduce a una contracción del consumo y con ello a la entrada en una espiral infernal de recesión?
    ¿Por qué Bruselas y Berlín no denuncian, entre otros, el brutal despilfarro de las administraciones públicas y especialmente el autonómico?
    Cada vez estoy más convencido de que en Berlín hay una óptica miope que, persiguiendo su propio beneficio, no se dan cuenta de que al hundir a otros miembros de la Comunidad terminan por hundirse ellos, pese a que ya les van apareciendo las primeras consecuencias de este proceder.

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    1. En comentarios recientes he oido que las cuentas tienen ciertas trampas. Tipicas trampas de gente sin escrupulos (habria que oir las quejas si hacen los mismo empresas privadas). Ejemplos:

      - Parece ser que se estan retrasando pagos (facturas de nuevo acumulandose en el cajon).
      - Retraso en devoluciones de impuestos.
      - La que me parece a mi mas gorda, que transacciones no recurrentes (no suceden cada año) se contabilicen a parte cuando son gastos (rescate bancario) pero se incluyan cuando son ingresos (ventas de activos).
      - Se dice tambien que las cifras autonomicas son un engaño.

      Sobre lo de Europa comento en relacion a la entrada de Juan Carlos.

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  2. Juan Carlos Martín4 March 2013 at 23:48

    A mi me gustaría añadir:
    - Los platos los están pagando los de siempre. Los asalariados a los que se les estám reduciendo el poder adquisitivo, la sanidad, la educaicón, la justicia, etc. La gente adinerada apenas está sufriendo esta recesión y no ha tenido una subida de impuestos salvo los indirectos del IVA (los que lo pagamos).
    - Reformas no es sinónimo de recortes, aunque el Gobierno siempre habla de lo primero y nunca de lo segundo, cuando en realidad casi todo lo que está aplicado son recortes.
    - Reformas de calado, como la del mercado eléctrico no se han llevado a cabo y se han quedado en tierra de nadie, la I+D se está reduciendo dramáticamente, la inversión ha caido, etc. Es decir, el país va claramente a peror en todos los órdenes excepto en la nivelación de la balanza de pagos y las exportaciones (algo es algo).
    - Al bajar la marea se han visto los restos: corrupción por doquier. No hay un rearme moral, ya que no dimite nadie por ello.
    - Europa está desaparecida! Los alemanes solo miran su ombligo y no les preocupa si hay un 30 o un 50% de paro mientras que no les afecte a ellos. Pero terminará haciéndolo.

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    1. Estoy de acuerdo en todo. Bueno, salvo que yo pienso que lo de los recortes no es tan cierto como se dice. Si, han recortado en lo facilon, lo obvio, lo sencillo... Pero esas partidas no se corresponden necesariamente con lo superfluo.

      El ajuste se esta haciendo sobre todo por el lado de los ingresos. Subidas de impuestos indiscriminadas y creacion de tasas.

      Respecto a Europa, tema en el que hemos discrepado, se esta volviendo al nacionalismo y al proteccionismo. Ande yo caliente riase la gente. Pero el problema va a afectar a todos los paises. No creo que el empobrecimiento de la poblacion en Europa vaya a favorecer las ventas de coches alemanes.

      Y yo sigo pensando que la operacion de maquillaje mediatico que se esta aplicando a la situacion tiene mucho que ver con el calendario electoral.

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    2. De acuerdo en todo lo que apunta Juan Carlos, salvo en la educación. Para mí no está nada claro que los recortes en este tema repercutan en la calidad educativa. Si no estoy mal informado, somos de los países con mayor coste por alumno y de los que peores resultados académicos obtiene. Ergo la calidad no tiene que ver con el gasto tanto como algunos pretenden hacer ver.
      En esto, como en todo, hay que buscar la eficiencia: aumentar la calidad reduciendo los costes todo lo posible.
      Por ejemplo, yo, que estoy a punto de cumplir los 70 años estudié mi carrera en clases que rondaban los 100 alumnos. Sin embargo creo que alcancé, como la mayoría de mi generación, una buena calidad profesional. ¿Repercute tanto en la calidad el número de alumnos por clase? me parece que no, que en lo que sí repercute, y muy negativamente es en costes.
      También en mi generación existía un gran respeto por el profesorado, respeto que hoy se ha perdido, y de lo que se lamentan los docentes, pero se han olvidado que fueron ellos los primeros en romper las barreras con el alumnado e impusieron un "colegueo" del que ahora están recogiendo los frutos. Es un tema que también viví en primera persona a través de mis hijos.

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  3. Como anteriores gobiernos, es más cómodo ir a lo fácil (recortes en sanidad, educación, I+D ...) que afrontar la realidad cogiéndola por los cuernos. En vez de reducir el personal implicado en los servicios sociales hay que hacerlo en la red de amiguismos que se tiende a establecer; pero claro, ¿quien se quita de en medio al sobrino de o al primo de?

    Gastos superfluos; también muchos, por ejemplo las televisiones autonómicas. Como cualquier otro medio de comunicación tienen que ser viables económicamente; que no son sostenible tal y como están, pues o se reforman para que lo sean o se cierran ya que no proporcionan servicios básicos para la comunidad... ah!, eso sí, son muy cómodas para que los políticos de turno, así tienen quien les hagan la pelota.

    Sobre la actitud complaciente de las autoridades europeas/alemanas en este desaguisado creo que es debida a una salida por lo fácil. Piden austeridad; más o menos se la dan (o camuflan las cuentas para que lo parezca) y con eso se conforman. Pero es un error a largo plazo para ellos que no aprienten las tuercas para reclamar medidas realistas.

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